08:43
minutos de lectura
|
La Inteligencia Artificial ha llegado para cuidar tu bolsillo. Acompáñanos a conocer el potencial futuro y la influencia que ya tiene la IA en el mundo de las finanzas.
Qué tiempos aquellos (hace un año, más o menos) cuando nos sentíamos en Blade Runner por preguntarle cosas a ChatGPT, ¿verdad? Probablemente, pocos pensaron que terminarían fiando su dinero a un robot. Pero si la IA ya puede hacer vídeos hiperrealistas, ¡cómo no va a poder gestionar nuestras finanzas!
Efectivamente, ya hay robots controlando dinero. Y, créenos, se les da bastante bien. Análisis de patrones de gasto, establecimiento de objetivos de ahorro, sugerencias de inversión... Vamos a ver algunos ejemplos de lo que podemos hacer con la inteligencia artificial aplicada a nuestras finanzas. ¡La imaginación es el límite!
*Si tienes el síndrome de Sarah Connor, acepta un consejo: mejor no sigas leyendo.
¿Automatizado? Sí, gracias.
Seamos sinceros. A veces sienta bien no depender de un humano. Gracias a la IA, podemos automatizar muchos procesos relacionados con los servicios bancarios.
¿Sábado de insomnio y te asalta una duda básica sobre tu banco? Por suerte, es probable que tengas un chat disponible 24 horas para solucionarla gracias a la Inteligencia Artificial. El mundo de la atención al cliente está avanzando a pasos agigantados con nuevos softwares que permiten encontrar soluciones en tiempo real a cualquier hora.
En Duemint, a la hora de programar, nos apoyamos en Github Copilot. Es una herramienta de IA que autocompleta lo que quieras programar basándose en tu forma de escribir código... ¡y la mayoría de las veces acierta!
Alex Arenas, Frontend Developer
Y podemos ir más allá. También te ayuda a ahorrar tiempo. Por ejemplo, la IA agiliza y mejora la precisión en la evaluación de solicitudes de crédito, analizando rápidamente grandes volúmenes de datos financieros para determinar la elegibilidad de un solicitante. Lo que antes tomaba días, ahora se hace en un solo clic (¡como pasa con Duemint!).
I(nversiones) A(sombrosas)
El mundo de las inversiones se parece a un microondas con 10 páginas de instrucciones. El funcionamiento en sí no es tan complicado, pero a ver quién se para a leer tanta documentación para comprobar que todo esté bien hecho.
Pues imagina que tuvieras una herramienta que analice en cuestión de segundos montañas de datos financieros para identificar oportunidades de inversión. Y, por si fuera poco, que además te ayude a predecir el aumento de las acciones de una empresa simplemente analizando tendencias de búsqueda en Google. Pues algo así es la IA, y además te cabe en el bolsillo.
IA vs Fraude financiero
Probablemente ya empieces a ver que la IA es una auténtica crack a la hora de analizar patrones de comportamiento. Y por eso mismo es una gran aliada contra el fraude financiero.
Capaz de supervisar millones de transacciones de forma simultánea, la IA crea algoritmos que detectan comportamientos anómalos que pueden ser fraudulentos. ¿No has comprado nunca juguetes con tu tarjeta y, de repente, te gastas la mitad de tus ahorros en ositos de peluche? Sorpresa: detrás de ese mensajito de tu banco avisándote de que es posible que estén usando de forma fraudulenta tu tarjeta no está tu ejecutiva de confianza. Es la IA aplicando patrones para proteger tu dinero.
De hecho, cada vez más organismos públicos están incorporando esta tecnología como parte de sus protocolos de prevención contra el fraude. Algunos, apoyándose en la IA (como es el caso del Servicio de Impuestos Internos (IRS) de los EE. UU o el Canada Revenue Agency) y otros desarrollando herramientas propias como Xenon -de la Agencia Tributaria de España- o Connect, del HM Revenue & Customs del Reino Unido.
¿Y qué pasará en el futuro?
Si lo supiéramos, ¡ganaríamos más dinero que con nuestra plataforma financiera! Pensar en los límites de la IA en el mundo financiero ahora mismo es como intentar ponerle diques al océano. Es una tecnología que avanza tan rápido que es difícil sacarle todo el provecho antes de que ya haya un siguiente avance a la vista. ¡Las oportunidades son casi infinitas!
Una cosa es clara: no se trata de una tendencia pasajera, sino que ha llegado para quedarse. Ya sea para aportar nuevas soluciones para problemas financieros y económicos a escala global como para agilizar tus finanzas personales, la IA está cambiando las reglas del juego. La pregunta ya no es si la IA afectará nuestras finanzas, sino cómo podemos aprovechar al máximo esta tecnología para nuestro favor.
No sabemos lo que deparará el futuro, pero no podemos esperar para contártelo.
E-Book
Duemint
Compartir